Son un conjunto de componentes que controlan el ingreso y salida de personas a empresas, residencias o áreas restringidas que requieren ser monitoreadas y protegidas dada su vulnerabilidad y riesgo de robo de patrimonio o información. Así mismo, permiten el reconocimiento de individuos por medio de elementos que identifican sus huellas dactilares, tarjetas, iris, facial, entre otros. Estos también son monitoreados por el personal autorizado y encargado de la vigilancia de los lugares, para brindar mayor seguridad.
Los sistemas de control de acceso se clasifican en dos tipos, los autónomos o de ingreso en red; el primero funciona sin estar conectado a un PC o una central, el segundo está directamente dirigido por un software que registra todas las operaciones con horario, fecha, y otras opciones, según sea la necesidad del caso. Son soluciones de seguridad hechas a medida por medio de un análisis de vulnerabilidad con el objetivo de brindar una arquitectura oportuna e inversiones asertivas.
La controladora es un administrador a nivel físico, permite obtener registros de ingreso y salida. Cada dispositivo tiene su lector específico y su instalación se hace integrando un sistema completo que procesa la información suficiente para generar las autenticaciones y los procedimientos de comprobación suficientes para autorizar el paso de visitantes o trabajadores en general
Los dispositivos de autenticación son un conjunto de equipos que permiten leer una solicitud de ingreso o paso realizando aprobación para acceso. En algunos casos, es imprescindible la restricción de ciertos individuos a las instalaciones, así como la regulación de espacios específicos y este sistema es ideal y de última generación tecnológica para verificación y vigilancia de quienes entran a la empresa o cualquier otro lugar. Es de gran utilidad para hacer un seguimiento de hora de llegada y salida, entre otras funciones para seguridad residencial o empresarial.
Son sistemas altamente confiables en términos de control de acceso, este tipo de elementos se utilizan para restringir o permitir el ingreso a una zona determinada por medio de la identidad de las personas, en entornos automatizados que impiden o aceptan el paso físico de alguien. Este tipo de aplicaciones suelen estar conectadas a puertas o talanqueras y se usan para vehículos, identificación digital o acceso en general.
Estos elementos se utilizan para trancar o asegurar una puerta magnéticamente, es ideal para los sistemas de control de acceso de seguridad electrónica para oficinas, conjuntos residenciales,. Vienen de diferentes especificaciones que permiten su adaptabilidad a puertas de madera, vidrio, metal, y dependen también del peso. Es la alternativa ideal para automatizar el ingreso y la salida de lugares, más exactamente para tener un control en los respectivos sitios o espacios.
Los software de integración para los sistemas de control de acceso son imprescindibles para la gestión de todas las operaciones desde una única plataforma que permite tener mayor seguimientos y monitoreo sobre toda información o movimientos. Puede conectarse a múltiples funciones y así tener registro de todas las transacciones a nivel de almacenamiento.
Son sistemas de registro no invasivos, son los que proporcionan la información sobre la posibilidad del porte de elementos prohibidos en un lugar, como armas u objetos contundentes, sin requerir la apertura de maletas, bolsos o entrar en contactos con los individuos. Es muy común verlos en aeropuertos y entidades financieras.
Los sistemas de bloqueo se presentan en varias tecnologías de barras fijas, o articuladas para pasos peatonales o vehiculares y considerando personas con movilidad reducidas, son las encargadas de garantizar el no paso de los individuos previa autenticación, la barrera física puede ser parte de la estructura como puertas o portones a los que se les instala los electroimanes o electro cerraduras o ser instalada como parte del proyecto de seguridad como el caso de molinetes, torniquetes, pasillos motorizados, brazos ala de ángel o talanqueras.